¿Qué hace exitoso a un restaurante? Con la llegada del nuevo año, esta es la pregunta que se hacen los emprendedores que han visto el desarrollo del sector. Las ventas han crecido de manera sostenida, hay mayor tráfico y los comensales tienden a gastar más. Con la esperanza de que las cifras continúen en aumento, para muchos la restauración se perfila como el sector ideal para apostar en 2019.
Sin embargo, de acuerdo con el mismo Ferran Adrià, la mitad de los restaurantes cierran antes de cumplir 5 años “y el veinte por ciento solo duran dos”. Es cierto que en los últimos años el número de establecimientos ha ido en aumento, pero muchos de ellos se han quedado en el camino. Con este panorama, ya no es suficiente con tener comida de buena calidad, un servicio óptimo o una propuesta distinta: quienes quieren sobrevivir, deben apostar por la innovación.
El Anuario de la restauración organizada en España secunda esta idea: “los cambios de hábitos de los consumidores, nuevas formas de comunicarse con los mismos y la aparición de nuevos modelos de negocio, están transformando el sector de la restauración a través, fundamentalmente, de la digitalización”. De hecho, este informe de KPMG asegura que en cuanto a áreas previstas de inversión, las herramientas tecnológicas serán el destino preferido de los restauradores.
Para quienes quieren saltar a la digitalización, optar por un TPV inteligente es un buen punto de partida. Estos sistemas no solo permiten modernizar la caja registradora tradicional, sino que también incorporan nuevas funcionalidades que facilitan el análisis y gestión del negocio. Irene Camacho, Marketing Manager de la startup de TPV Tiller Systems, señala 6 razones por las que cualquier restaurante necesita una caja registradora conectada como Tiller.
- Flexibilidad de pagos
La flexibilidad es clave a la hora de atender a los clientes, por lo que debes garantizar que escojan cómo quieren pagar. Contar con un TPV inteligente te permitirá aceptar todos los tipos de pago, dividir la cuenta, invitarles artículos y más. Con Tiller, por ejemplo, puedes separar la cuenta en partes iguales, hacerlo por plato o incluso introducir manualmente el importe indicado por cada cliente en pocos clics.
- Funcionalidades personalizadas
Un restaurante no es un negocio cualquiera, y por eso tampoco debería contar con un sistema genérico de gestión. Si optas por un TPV para establecimientos de hostelería podrás gozar de funcionalidades personalizadas como plan de mesas, gestión de reservas y cartas múltiples directamente desde tu caja registradora. De acuerdo con Camacho, en el caso de Tiller “puedes replicar las mesas de tu restaurante en tu TPV, hacer cambios de menú automáticos, fijar precios especiales a ciertas horas… básicamente hacer el TPV tuyo”.
- Fácil integración de aplicaciones
La llegada de la digitalización ha traído como consecuencia que los restaurantes dependan cada vez de un mayor número de servicios: plataformas de reservas, delivery, gestión… no es poco común encontrar una variedad de pantallas en el mostrador de cualquier establecimiento. Al contar con un sistema abierto como Tiller, existe la posibilidad de integrar estas soluciones para controlar tu negocio desde el mismo dispositivo.
De acuerdo con Dimitri Farber, fundador de la compañía, “en un ecosistema cada vez más complejo, Tiller busca ser el aliado digital del comerciante centralizando todas las herramientas que necesita en un solo lugar”. El TPV cuenta con su propio AppMarket, un mercado digital que recoge distintas integraciones disponibles, desde herramientas de gestión como Beesniss y Hotelgest, hasta gestión de reservas como CoverManager o ElTenedor. La startup incluso desarrolla sus propias soluciones, como es el caso de Tiller Delivery, para ofrecerle al restaurador la posibilidad de gestionar todos los aspectos del negocio desde la caja registradora.
- Actualizaciones de software
Como restaurador, si hay algo que debes evitar a toda costa es quedar obsoleto. El sector se transforma a un ritmo acelerado y debes estar preparado para adaptarte a las nuevas tendencias. En el caso de Tiller, Camacho establece que cuentan con un equipo de desarrolladores trabajando constantemente en actualizaciones para potenciar el sistema: “la última versión ha traído novedades como una interfaz de pedidos renovada, reconocimiento automático de menús, controles de acceso para empleados y más”. Esto también quiere decir que cualquier error puede ser fácilmente corregido y que el feedback de los clientes se traduce en mejoras para la aplicación.
- Datos en tiempo real
El conocimiento es poder y la caja registradora es la herramienta central perfecta para recolectarlo. Además de funcionar como punto de venta, es necesario escoger un TPV que sirva como sistema de gestión. Tiller, por ejemplo, cuenta con un back office que te permitirá controlar todas tus métricas en un vistazo. ¿Algunas de las cosas que puedes hacer? Monitorizar las ventas, comparar distintos periodos, identificar tus mejores y peores productos, revisar y enviar tus informes contables y gestionar tu stock en tiempo real.
Un punto clave, sin duda, es la posibilidad de controlar tu restaurante de forma remota: “el back office de Tiller es una página web, por lo que no tienes que estar en el restaurante para saber lo que está pasando”, señala Camacho. “Esta es una de las funcionalidades preferidas de nuestros clientes, la posibilidad de analizar el desempeño del negocio de forma remota en cualquier momento y lugar desde el móvil u ordenador”.
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- Soporte directo
Las pantallas táctiles son tan intuitivas que cualquiera puede aprender a manejarlas. Gracias a la popularidad de los smartphones, todos están acostumbrados a las pantallas sensibles, por lo que aprenderán a navegar por el sistema en un instante, librándote de horas de entrenamiento para nuevos empleados. Sin embargo, Tiller cuenta con un servicio de atención al cliente disponible para cualquier duda. Además de una formación inicial, el equipo de soporte atiende por teléfono y a través de un chat directamente en el TPV, ideal para que los empleados puedan resolver cualquier duda durante el servicio.
Si bien optar por una caja registradora tradicional puede ayudarte a reducir los costes, la adquisición de un punto de venta es un paso esencial hacia la digitalización que no debe tomarse a la ligera. Con un panorama como este la conclusión es simple: innovar es arriesgado, pero dejar de hacerlo lo es aún más.
