Diego Coquillat - El Periódico de los Restaurantes

ChatGPT-3 qué es y cómo usar este chat de inteligencia artificial en un restaurante

¿Qué día no surge una tecnología capaz de cambiar la operativa del restaurante para siempre? El sector hostelero está sujeto a una transformación digital incesante. Con los años, el funcionamiento tradicional del restaurante casi ha desaparecido. Es un proceso deseado, pues con el uso de las últimas innovaciones tecnológicas también llegan la eficiencia, el rendimiento económico y la satisfacción del consumidor.

Entre estas tecnologías de nueva generación, hay una que está causando furor en las redes últimamente. Noticieros y periódicos acaparan titulares protagonizados por diferentes inteligencias artificiales (IA): Midjourney, Stable Diffusion, DALL-E 2…

Las tres primeras se especializan en generar arte. Artistas y diseñadores gráficos están con los nervios a flor de piel, ven cómo su modo de ganarse la vida está en juego y, además, estas IA han sido entrenadas con sus creaciones sin pagar regalías. Lo ven como un robo y una sentencia de muerte.

Imagen generada con inteligencia artificial.Son los techies los que se sienten más cómodos empleando estas herramientas: unas veces por desconocimiento de las peculiaridades detrás del desarrollo de la tecnología y otras porque simplemente silencian su brújula moral.

Volviendo a las IA listadas, la última está diseñada para generar textos con lenguaje natural. Así, ya hay quien la ha empleado para sacar recetas. ¿Tienen las recetas diseñadas por IA algún futuro? ¡Descubrámoslo!

Pan de cerveza, chocolate y arroz inflado de ChatGPT y Michael Wolf

ChatGPT es una aplicación de usuario basada en la inteligencia artificial GPT-3, un producto del proyecto OpenAI que pretende democratizar el acceso a esta tecnología a todo el mundo.

Michael Wolf, escritor especializado en restauración, uso la herramienta para diseñar una receta imposible. Le preguntó a la IA cómo hacer pan con cerveza, chocolate y Rice Krispies. ChatGPT se puso de inmediato manos a la obra. En escasos segundos presentó en pantalla una receta con un encabezado, una lista de ingredientes e instrucciones de preparación.

La Inteligencia Artificial optimiza los pedidos de voz en las cadenas de restaurantes.
DiegoCoquillat.com

La IA propuso emplear harina común, coco en polvo sin azúcares añadidos, levadura, bicarbonato de sodio, sal, mantequilla sin sal, azúcar, huevos, cerveza muy fermentada —ale oscura o stout—, Rice Krispies y galletas de chocolate no muy dulces.

Luego, indicó al escritor cómo debía desarrollarse la sesión de repostería con instrucciones detalladas: a qué temperatura poner el horno, qué instrumentos utilizar, en qué orden añadir cada ingrediente, etc.

Cuando Wolf intentó encontrar la receta en internet, no había ninguna similar. Se trataba de una creación única de la IA. Fascinado, volvió a solicitar otra receta: un plato de pasta con ajo y salsa putanesca. Luego pidió una versión apta para dietas cetogénicas, y la IA propuso sustituir la pasta por espaguetis de calabaza o fideos de calabacín. También quiso una guarnición, ChatGPT se la dio. Para terminar, la IA hizo de sumiller y recomendó dos caldos para acompañar la comida: Pinot Noir y Sangiovese, a elección del comensal.

La IA propuso emplear harina común, coco en polvo sin azúcares añadidos, levadura, bicarbonato de sodio, sal, mantequilla sin sal, azúcar, huevos, cerveza muy fermentada —ale oscura o stout—, Rice Krispies y galletas de chocolate no muy dulces.La conversación con el programa continuó, dejando a Wolf completamente abrumado por las posibilidades.

Rotinis con pesto de aguacate al agua de rosas de ChatGPT y Logan Richardson

Logan Richardson es un físico atómico, youtuber y apasionado de la ciencia de los alimentos. En su canal de YouTube, Flavor Lab, también puso a prueba a ChatGPT. En comunión con su estilo irreverente, Richardson aspiró a crear una receta imposible para un humano.

Su primer contacto con la IA solo dio recetas que muy fácilmente pudrían ya existir. Él buscaba algo más, así que comenzó por solicitarle a la máquina que listase seis ingredientes infrecuentes. Los escogidos fueron: suero de mantequilla, agua de rosas, melaza de granada, algas, aceite de aguacate y gochujang, una salsa picante coreana.

Acto seguido, Richardson pidió una receta que incluyese estos ingredientes. La IA no tardó ni un segundo en ofrecer una: pasta con pesto de aguacates al agua de rosas. Como en el caso de Wolf, el sistema ofrecía todos los ingredientes necesarios, sus cantidades y las instrucciones para cocinar el plato.

A diferencia del escritor, Logan quiso rodar todo el proceso, desde la concepción hasta la cata. Durante el vídeo, el creador de contenido demostró su inquietud por la cantidad de agua de rosas que la IA recomendó. Pese a reducirla considerablemente, acabó siendo la razón que arruinó sus rotinis. Al probar el plato, Richardson solo tenía muecas de desaprobación en su cara.

Pese a ello, el youtuber destacó el perfil de sabor único del plato y comentaba para su audiencia: «¿Recomendaría cocinar esto? Quizás si omitís el agua de rosas». Las IA no son perfectas, pero se están acercando.

¿Pueden los restaurantes usar ChatGPT?

ChatGPT es una herramienta abierta al público. Hay pruebas gratuitas, pero su uso continuado consume créditos que habrá que pagar.

Las recetas de esta IA no ganan estrellas Michelin —de momento…—, pero se puede usar para escapar de nuestros marcos preestablecidos, romper bloqueos creativos y prototipar nuevos platos rápidamente. En definitiva, un arma más en nuestro arsenal.

5/5 - (2 votos)
Suscripción a Diego Coquilla; El Periódico de los Restaurantes

Deja un comentario

×