Dejemos a un lado las clásicas mesas proporcionadas por marcas de cerveza o las sombrillas de Coca-Cola. Da un paso más y prueba a asociarte con una marca acorde con tu negocio que te proporcione los uniformes, por ejemplo. Estamos hablando de lograr patrocinadores para tu restaurante.
¿Por qué conformarse con los clásicos uniformes bicolor de camarero? Las zapatillas Air Jordan pueden ser un complemento perfecto para los camareros y una novedad atractiva para los clientes. Esto es precisamente lo que ha hecho el restaurante de Nueva York Dirty French. Ellos han traído un soplo de aire fresco a la clásica elegancia de los camareros, ya que todo el personal que atiende las mesas lleva deportivas Air Jordan.
Dirty French, que se encuentra dentro del Hotel Ludlow, es un bistró con temática de los años 80 que pertenece al grupo Major Food Group, una cadena de restaurantes neoyorquina fundada por Mario Carbone, Rich Torrisi y Jeff Zalaznick. Este trío se ha ganado su reputación con restaurantes no convencionales y las más estrafalarias indumentarias, pero con el atuendo de Dirty French han dado un golpe maestro.
“Siempre fue mi sueño abrir un restaurante donde todo el personal llevase estas deportivas”, dice Zalaznick. “Finalmente se ha hecho realidad en Dirty French porque el restaurante tiene una temática de los ochenta y fue en esa década cuando Jordan empezó a hacer zapatos y deportivas, y se convirtieron en una parte muy importante de la cultura”, añade uno de los fundadores.
La indumentaria tiene un sentido para los fundadores pero, ¿cómo facilita el trabajo actualmente? Zalaznick dice que las zapatillas se guardan en la cocina después de cada turno y son limpiadas con regularidad. Para los empleados las zapatillas Air Jordan son más confortables y cómodas que los zapatos tradicionales. La indumentaria también tiene sentido para Michael Jordan. El exjugador de baloncesto más conocido de la historia de la NBA ha comido en el restaurante. “Me encanta la comida pero el encanto también reside en los zapatos”, dijo el baloncestista.
En este caso, Air Jordan no patrocina a este restaurante, los camareros llevan las deportivas porque los dueños querían hacerlo, pero esto nos puede dar una idea. Al igual que los jugadores de fútbol llevan estampadas marcas en sus camisetas, y cada vez más en el trasero del pantalón, el personal de un restaurante o cafetería también podría hacerlo. ¿Nos adentramos un poco más?
Sombrillas de Coca-Cola:
La tienda del merchandising de Mahou:
O polos de Estrella Galicia:
Esto nos sirve como ejemplo para comenzar, pero no es exactamente a lo que nos referimos. En estos casos la marca se lo regala directamente al negocio para beneficio propio. Es decir, para que los clientes que pasen por ahí asocien su marca con una experiencia y, sobre todo, la tengan presente. A lo que nos referimos es a que marcas, que en principio no guardan ninguna relación con la hostelería, decidan patrocinar tu negocio.
El patrocinio podría realizarse mediante la inclusión del símbolo o logotipo en el polo del camarero, en el delantal o en las servilletas y manteles. Otra opción es que si la marca que patrocina es una firma de ropa, quede claro que esa ropa tan bonita y práctica que llevan los camareros es de esa marca, como en el caso de las Air Jordan.
Aquí tenemos varios ejemplos de que la gastronomía está de moda y de que la moda está en la gastronomía. Cada vez más restaurantes se asocian con firmas de moda para dar un toque exclusivo al uniforme de batalla del personal. Hablamos de esa gastronomía en la que la estética cobra tanta relevancia como la propia comida.
Le Cabrera ha elegido la marca El Ganso como vestimenta, ropa chic con un toque de estilo británico. Esta iniciativa resulta moderna y estilosa, aunque puede llevar a otros a la palabra pretencioso. No obstante, y sin lugar a dudas, se trata de uniformes con personalidad y que diferencian al personal. En este enlace el fundador explica por qué se decantó por esta marca. Puede que El Ganso no pague al restaurante por llevar su uniforme, pero puede que sí le regale o rebaje los uniformes, y eso ya supone un ahorro.
Lamucca de Prado es un local animado, con zona de barra para cocktails y copas, con comida como hamburguesas o nachos, mesas grandes y precios asequibles. Su atuendo corporativo es de la marca Pepe Jeans. Una estética también británica pero más gamberra o grunge. En este caso más acorde con camareros jóvenes e internacionales. ¿Te enamora el camarero argentino? ¿Acaso no puedes dejar de mirar a esa camarera sueca de piel de cristal? Eso puede pasar en Lamucca de Prado.
Columbus se encuentra dentro del Casino Gran Madrid Colón, combinación del juego y la gastronomía. Un afterwork, una cena, un sitio original para una cita… Aquí el estilo cuenta y los camareros visten, en este caso, de Tenkey, marca madrileña que “reinterpreta y se apropia de la visión del hombre de nuestro tiempo, con un toque de otra época”. Las chicas, por su parte, visten de Whiz, marca que “rinde tributo al espíritu de la mujer actual con una explosión de colores y una riqueza de tejidos y detalles en todas sus prendas”.
No solo se trata de que una marca de ropa ‘regale’ los uniformes a los camareros, esta unión va más allá, ya que marca y restaurante quedarán asociados para siempre. Esto se consigue completando el vestuario con otros eventos. Carmen Hummer, personal shopper, cuenta en su blog cómo tras la pasada edición de MFSHOW MEN, el equipo de la firma Tenkey invitó a un grupo de bloggers acreditados a disfrutar de un menú degustación en el “magnífico”, así calificado por Hummer, restaurante Columbus. Tenkey viste al staff de Columbus y, además, les lleva clientes. Clientes que, por otro lado, hablarán del restaurante en sus blogs y atraerán a otros clientes, como hizo Carmen Hummer, ya que estamos hablando de personas con cierto poder de influencia.
En este caso, hemos hablado de un posible patrocinio mediante firmas de ropa. Ya sea así o con marcas de restauración, que seguramente serán más propensas a ello, hay que tener en cuenta la identificación. Los clientes asociarán los valores de la firma que patrocina tu restaurante con tu negocio, al igual que su filosofía, sus aciertos o errores. Por lo tanto, hay que estudiar bien a quién se solicita un patrocinio. Hay que intentar que la marca encaje con la filosofía de la empresa. Si nuestro restaurante se orienta a los jóvenes, con platos originales de precio asequible, en un entorno distendido pero con calidad, no es una buena opción elegir una marca de lujo para que diseñe y patrocine los uniformes.
Primeros pasos para conseguir patrocinador para un restaurante
El patrocinio puede partir desde algo sencillo, como ya hemos mencionado, proporcionar un congelador o nevera en una tienda en la que esté visible, servilleteros, mesas, toldos…hasta hacerse cargo de la imagen del negocio. El patrocinio puede tratarse de los electrodomésticos, el mobiliario, procesos publicitarios y hasta dinero en efectivo.
El primer contacto para este tipo de relación puede buscarse con los proveedores o visitadores. Dependiendo del tamaño y la importancia del acuerdo, serán ellos los que se encarguen de supervisar la relación de patrocinio o, por otro lado, podría ser el encargado de marketing de la marca para esa zona.
Si a lo que aspiramos es a algo grande, a una relación de patrocinio que vaya más allá de unos cuantos palilleros y servilleteros, lo mejor es dejar el asunto a algún experto en marketing y regir la relación por un contrato entre la marca y tu negocio. Para ello es importante tener claras nuestras intenciones y, en base a estas, escoger las marcas con las que podríamos trabajar. Cuando lo hayamos decidido y la marca haya aceptado, elaboraremos el contrato.
A cambio de qué puedes conseguir un patrocinador para el restaurante
Por otro lado, no todo van a ser ventajas para tu negocio. Seguramente, la marca que te patrocine exija algo: que su logo se vea, que algún plato escogido por la firma lleve el nombre de ésta, que haya menciones a la marca en determinados sitios, que los colores de la marca y el restaurante coincidan… Estas empresas ayudarán a tu negocio, generalmente, a cambio del manejo exclusivo de sus productos. Es decir, si la nevera es de una marca de refrescos determinada es probable que te pidan vender solamente sus productos. Además, puede que los patrocinadores soliciten un volumen mínimo de ventas, que se establecerá según el tamaño y giro del establecimiento.
Un ejemplo lo encontramos en una promoción que lanzó Chivas Regal con la finalidad de promocionar sus productos. Acondicionaba botellas para bares o restaurantes. La empresa de whisky cubría todos los gastos y pagaba a un diseñador para que, de acuerdo con la decoración del lugar, hiciese un expositor para mostrar sus bebidas. La idea de la marca era acercarse a centros donde concurra gente de entre 25 y 35 años, para acabar con la idea de que esta bebida es solamente para ‘gente mayor’. Además del expositor, la empresa agregaba recetas novedosas para preparar cócteles con ese whisky, cócteles que incluyen desde zumo de manzana, rodajas de fruta, hile frappe o Gingerale.
Quizá llegue el día en el que Nike diseñe una zapatilla basada en tu marca… Hay que intentarlo.
Hola
Me encanta la restauracion y mi proyecto es crear una terraza para dar comidas vegetarianas y ecologicas en un pueblo, a que la gente de las ciudades estan mas acostumbradas a la evolucion de los tiempos que estamos viviendo,
Las personas de los pueblos aunque esten proximos a ciudades no estan concienciadas al cambio,
Necesito ideas y colaboraraciones para lanzar el proyecto
La carta la tengo la pagina web tambien
Gracias Sofia por tu comentario, en este periódico digital tienes muchas ideas sobre lo que comentas, te deseo mucha suerte en tu proyecto
Necesito sponsort pata mi restaurant
Hola Mariela, seguro que con este artículo encuentras ideas para conseguir patrocinadores para tu restaurante.
Tengo un bar de copas en pie de playa necesito proveedores para renovarlo total.
Estoy abriendo un restaurancito y me gustaría poder tener ayuda en cuanto a patrocinadores