Los robots de reparto son la nueva moda. Una que, a diferencia de muchas otras, ha llegado para quedarse. Así, asistimos semanalmente a noticias del sector restauración que versan sobre el tema: la aparición del Kiwibot, la previsión de que este nicho de mercado triplique su volumen económico de aquí a 2024, las preocupaciones de los empleados que ven en la tecnología una destrucción de empleo segura, etcétera.
En esta ocasión las noticias llegan desde el Lejano Oriente, concretamente de Corea del Sur. Allí el escenario del reparto domiciliario de comida no está dominado por los jugadores habituales.
Ni Deliveroo, ni Just Eat, ni Uber Eats se han hecho con un pedazo significativo del pastel en el sur de la península coreana. Es un mercado inexplorado para las empresas extranjeras, al que además resulta difícil entrar ya que existe una compañía nativa que hace las delicias de los consumidores de Corea del Sur. Se trata de Baedal Minjok, el servicio creado por la empresa Woowa Brothers Corp. fundada por Kim Bong-jin.
En tan solo tres años planean estar realizando entregas de los pedidos que llegan a la app móvil mediante robots de reparto. Para ello acaban de conseguir un capital de 320 millones de dólares a través de agencias de financiación como Hillhouse Capital, Sequoia Capital y GIC. Este dinero irá destinado al desarrollo del prototipo que podría ver la luz este mismo año.
Con las previsiones de mercado publicadas por Markets and Markets Research Private Ltd. a las que hacíamos alusión al comienzo del artículo, Woowa Brothers Corp. Ha tomado la iniciativa para realizar una inversión millonaria y mantener su hegemonía en este mercado inexplorado. Según palabras del propio Kim: «Hemos demostrado que podemos generar dinero, por lo que preferimos aprovechar el momento para realizar más inversiones agresivas. Tenemos que cambiar y experimentar en todo momento».
Si bien el reparto domiciliario de comida está de su lado, con su crecimiento rápido y sostenido previsto para los próximos cinco años, hay que tener en cuenta que Baedal Minjok ofrece servicios en todo tipo de mercados: revistería, electrónica de consumo, artículos de cualquier mercado, etcétera. En total, percibieron unos ingresos de 180 000 millones de won en 2017 (unos 141 millones de euros), cifra que no ha hecho más que aumentar desde entonces. El valor de mercado de la compañía a día de hoy se sitúa en los 2500 millones de euros.
Los ciudadanos de Seúl y otras grandes ciudades coreanas donde opera Baedal Minjok ya están expectantes por la llegada de los robots de reparto. Algunos residentes se sentirán más cómodos tratando con robots, pues consideran que son más seguros que los repartidores humanos. Mientras, otros están preocupados por las dificultades que puedan experimentar los usuarios mayores menos acostumbrados a realizar transacciones digitales.
Kim Bong-jin ha erigido una de las seis empresas más importantes en el escenario de Corea del Sur gracias a su decisión y apuesta por la tecnología, y sus empleados están volcados con él gracias al plan de trabajo de 35 horas semanales, líder en el país. ¿Hasta dónde llegarán? Solo ellos lo saben.