En Londres triunfa un restaurante sostenible en el que solo trabajan mujeres inmigrantes y cuya materia prima son los productos ecológicos de las granjas locales.
En griego, Mazí Mas significa “con nosotros”, en Londres también significa oportunidad gracias a Nikandre Kopcke, fundadora del restaurante itinerante Mazí Mas. Se trata de una empresa social, una casa global en la que se cocina para el público y donde se crea empleo para mujeres inmigrantes o refugiadas.
Diferentes países, diferentes lenguas, diferentes nacionalidades se reúnen y conviven en armonía en la cocina de Mazí Mas, porque como las propias trabajadoras afirman, en la cocina todas hablamos la misma lengua. Al oírlas describir su trabajo se viene a la nariz el olor de la cocina de casa, ese olor que evoca amor, pasión y gusto por lo que se hace.
La visión de este restaurante global e itinerante, como dicen en su página web, es la de un mundo en el que las mujeres son participantes de pleno derecho, hay igualdad y son independientes en la vida pública. Su trabajo es valorado, se oye su voz y su habilidad tiene recompensa. Así ofrecen oportunidades a aquellas mujeres que aspiran a lograr una carrera en la industria de alimentos para adquirir experiencia, desarrollar sus habilidades, contar sus historias y conectar con el público.
En Mazí Mas se cocina el tipo de comida que a las trabajadoras y la fundadora les gusta, comida simple, llena de sabor y arraigada en las ricas tradiciones culturales de cada país de origen de las cocineras. Obtienen sus productos de las granjas de los alrededores de Londres y se enorgullecen al decir que usan ingredientes locales, de temporada y sostenibles, y no porque esté de moda, sino porque es así cómo sus madres les enseñaron a cocinar.
El teatro londinense Ovalhouse, conocido por el teatro experimental y político y por la dedicación al desarrollo de las comunidades excluidas, es un hogar natural para Mazí Mas. Su menú en Ovalhouse cambia diariamente dependiendo de quién esté en la cocina, por lo que sus clientes pueden seguirlas en Twitter para saber lo que se está cocinando cada día: @eatmazimas.
Además, aconsejan reservar mesa para evitar decepciones, ya que han estado muy ocupadas últimamente. En su página web se puede encontrar el número de teléfono y también descargarse el menú completo.
Mazí Mas es un restaurante especialmente apropiado para eventos privados y bodas de todos los tamaños. Están especializadas en la intimidad, en el transporte de experiencias gastronómicas que logran trazar historias de migración a través de la comida y forjan conexiones personales entre cocineras y comensales. Sus menús de fusión realizados a medida son inusuales y perfectos para banquetes comunales.
Como no podía ser de otra forma, la historia de este restaurante itinerante comienza con una mujer, María Maroulli. Nació en la isla Eubea, en Grecia, y se casó con un carpintero. Tras el golpe militar de 1967 se mudaron a Estados Unidos con sus dos hijos. Allí se desplazaban por aquellos lugares en los que su marido podría encontrar trabajo. Al instalarse en Astoria, la parte griega de Queens, sus hijos se marcharon de casa y María pasaba la mayor parte de su tiempo a solas. Con solo una educación primaria y con un inglés rudimentario, María no estaba cualificada para la mayoría de puestos de trabajo. Le encantaba América pero incluso tras quince años allí no se sentía parte de ella. Quería abrir una panadería pero nunca sucedió, su marido no quería oír hablar de ello, las mujeres no trabajaban, cuidaban de los niños. Así que, María respondió a un anuncio del periódico griego en el que se solicitaba una niñera y comenzó a cuidar a un bebé de dos meses.
Un cuarto de siglo después, ese bebé de dos meses es una mujer que se encuentra en Londres. Durante la infancia, su madrina María le había inculcado su pasión por la comida y la cocina. Esto la llevó a ser voluntaria en comedores sociales. Allí conoció a muchas mujeres como su madrina: mujeres inmigrantes que no podían encontrar trabajo o no tenían derecho a ello y no recibían ningún apoyo para asentar sus pies en un nuevo lugar. Estas mujeres eran voluntarias porque querían emplear sus cualidades culinarias, adquirir experiencia, conocer gente y ayudar a sus comunidades. Y, sobre todo, soñaban con tener, algún día, sus propias empresas alimentarias, de ahí surgió esta idea de negocio.
Irán, Etiopía, Turquía, Senegal, Perú y Nicaragua son los países desde los que estas mujeres han llegado a Reino Unido. Cada una de ellas tiene una historia, un sueño, una pasión y poder trabajar en Mazí Mas ha supuesto para ellas una gran oportunidad y, además, han podido conocer a mujeres en situaciones similares.
En Mazí Mas trabajan con mujeres que han estado fuera del mercado laboral durante muchos años y están luchando por encontrar trabajo por diferentes razones. Puede ser que hayan interrumpido su carrera por tener hijos, porque se encuentren con la discriminación racial, porque carecen de contacto con redes profesionales o porque sus títulos extranjeros no se reconocen. Por ello, desde Mazí Mas buscan romper el ciclo de desempleo ofreciendo apoyo intensivo e integral en un momento en el que estas mujeres más lo necesitan. Por el momento, tres chefs de Mazí Mas están en proceso de desarrollar sus ideas para sus propias empresas alimentarias.
En Mazí Mas la comida no es solo un placer para sus comensales sino también para sus cocineras. Un restaurante que demuestra que la solidaridad y el apoyo mutuo también puede ser un modelo de negocio de éxito.