El uso de la música en el sector de la hostelería ya ha sido explorado en el pasado. Las canciones con letras prosociales —aquellas que invocan comportamiento positivos— llevan aparejadas un mayor consumo en el establecimiento por parte de los clientes mayores, especialmente. Así, hacer sonar este tipo de obras es una práctica frecuente en restaurantes y supermercados.
Ahora bien, ¿qué otras utilidades tiene la música en el ámbito de la hostelería? Sabemos que los granjeros usan la música clásica para calmar a las bestias —así, las vacas producen más leche—. Ahora, McDonald’s hace lo mismo: ponen a Beethoven para calmar a las bestias, en este caso, con el objetivo de que tengan menos mala leche.
El McDonald’s galés de Wrexham en problemas
Las pandillas juveniles están haciéndole la vida imposible al franquiciado del McDonald’s de Wrexham (Gales, Reino Unido). Los ataques se han sucedido una y otra vez, requiriendo la emisión de sendos informes por parte del inspector Luke Hughes, del Departamento de Policía de Gales del Norte. Un grupo de 20-30 jóvenes pandilleros son los causantes del problema.
Cansado de las fechorías y del comportamiento antisocial de este grupo, el responsable se ha inspirado en el McDonald’s de Shepherd’s Bush, que mediante el uso de música clásica ha logrado reducir significativamente el número de altercados que tienen lugar en sus premisas. De los 71 incidentes ocurridos en 2017, han pasado a apenas una fracción.
Combatir el crimen con música clásica
Atul Pathak fue el pionero de la experiencia. En Shepherd’s Bush usaron la música clásica a ciertas horas del día para definir el ambiente que querían: uno más calmado y tranquilo. Tuvieron éxito y la marca tomó nota.
McDonald’s ha extendido esta metodología a otros locales situados en barrios conflictivos. Por lo general, ponen música clásica a media tarde y la mantienen hasta el cierre. En algunos locales, las alegres sinfonías de los grandes maestros se escuchan solo bien entrada la noche: no es necesario que suenen a otras horas del día.
Desde McDonald’s indican que «han testeado los efectos de la música clásica en el pasado y la han puesto en algunos de los restaurantes, ya que fomenta un comportamiento más aceptable».
Beethoven en el McDonald’s de Wrexham
El McDonald’s de Wrexham seguirá las directrices de la cadena. Para ello, a partir de las cinco de la tarde, en el local sonarán melodías alegres compuestas por Beethoven. Además, el wifi se apagará a partir de esa hora para evitar atraer a los jóvenes problemáticos. Si tienen éxito, pretenden decir adiós a las experiencias que han vivido hasta el momento: asaltos, uso innecesario de extintores, vandalización de las instalaciones y trato inadecuado a personal y clientela. Esperamos que tengan éxito.