Aunque pizzerías como Pizza Hut, Telepizza o Domino’s Pizza fueron las pioneras del reparto de comida a domicilio, en los últimos años nos hemos acostumbrado a este servicio a través de empresas como Uber Eats, Just Eat, Glovo y similares.
Es un fenómeno que sucede de forma sincronizada en todo el mundo. Además, no se trata de una moda pasajera. Este segmento de mercado, el de la movilidad o delivery, lleva creciendo más de una década. Dado que no se prevé que este crecimiento cese, es lógico que cada vez haya más oportunidades disponibles para pickup, takeaway o reparto.
Con la llegada de la pandemia causada por el SARS-CoV-2 chino, los restaurantes que ofrecían sus platos para llevar fueron los menos afectados. Por el contrario, los locales de alto standing, aquellos donde el negocio preponderante se originaba on-premise, fueron los que más sufrieron el embate de los primeros confinamientos y cierres.
Restaurantes con estrellas Michelin, establecimientos dedicados a la alta gastronomía, a la cocina molecular o al ultralujo tuvieron que adaptarse rápidamente para no perecer en el ambiente cambiante azuzado por el coronavirus. De este modo, no tardaron en aparecer las primeras apuestas por un servicio de delivery de nivel gourmet.
Ahora, este concepto se proyecta por doquier.
La idea de CookUnity
Con el advenimiento de las cocinas fantasma y la fortaleza demostrada por el segmento orientado al reparto de comida a domicilio, CookUnity tuvo la magnífica ocurrencia de llevar platos de autor a las casas de sus clientes.
CookUnity es un colectivo formado por chefs que aspira a llevar las mejores creaciones de los expertos cocineros directamente de los fogones a las casas de los comensales. Se fundó en 2015 en Brooklyn (Nueva York, EE. UU.) y desde entonces ha cosechado gran éxito.
Para empezar, la empresa ha atraído la atención de los inversores. Ya han pasado por ocho rondas de financiación. Solo en la última, una perteneciente a la Serie B americana, lograron recaudar 47 millones de dólares para llevar el concepto cuantas casas fuese posible.
La reciente ronda fue liderada por Insight Partners, un fondo inversor neoyorquino especializado en e-commerce y programas informáticos. Acompañaron otros grandes fondos, como Endeavor Capital, IDCV, Fuel Venture y Gaingels. Añadidos esos 47 millones a la recaudación de la Serie A organizada por CookUnity a principios de año, han alcanzado una valoración de más de 70 millones de dólares. Un monto que les pone en una situación muy ventajosa para dominar el mercado de la movilidad gourmet en Estados Unidos.
Impresiones de los inversores y emprendedores
Por supuesto, los fondos de inversión no apostarían estas cantidades por el éxito de la empresa emergente si no tuviesen las cosas muy claras. Desde Insight Partners, Rebecca Liu-Doyle, directora de la organización, comenta: «CookUnity está creando un mundo donde la gente puede tener una conveniente suscripción que provee la calidad y la emoción de los mejores restaurantes del país: es una experiencia culinaria completamente nueva. El modelo de negocio de beneficios compartidos único de CookUnity demuestra un rápido crecimiento, los datos indican con claridad que los consumidores lo desean y que los chefs talentosos lo necesitan».
Por su parte, el director ejecutivo de CookUnity, Mateo Marietti, ya piensa en la expansión que ha de suceder a estas rondas de financiación: «Con la expansión de nuestra plantilla y la financiación procedente de expertos, estamos en una posición ventajosa para solidificar una categoría de “suscripción al chef”, el primer concepto del mercado que apoya tanto a los chefs autores como a los entusiastas de la comida».
El crecimiento de CookUnity es exponencial gracias al concepto ganador y al apoyo prestado por los fondos de inversión.
¿Quién participa en CookUnity y qué ofrecen?
Actualmente 50 chefs ya colaboran con la iniciativa. Pero para mediados de 2022, Marietti quiere que este número se haya triplicado. Solo los mejores autores tienen cabida en la plataforma. Por ejemplo, recientemente se han unido como socios Ludo Lefebvre, premiado con estrellas Michelin, así como los ganadores del precio gastronómico James Beard: Michell Bernstein, Hugh Acheson, Jonathon Sawyer y Bryian Caswell.
La plataforma ofrece nuevos platos todas las semanas. Mientras se escriben estas líneas, la página de CookUnity lista el ramen bulgogui de Esther Chou; la calabaza Delicata ecológica con salsa de setas, lentejas y anacardos al orégano de Emily Peck o el kebab de cordero con hummus de cúrcuma y batata a la brasa de Akhtar Nawab, por mencionar algunas de las creaciones mostradas, todas ellas con un aspecto realmente apetitoso.
De esta manera, los clientes pueden degustar platos magníficos sin caer en la monotonía. Solo tienen que hacer un pedido desde su dispositivo móvil y concretar el momento en que se realizará el reparto. Los chefs cocinan toda la comida en ese preciso instante, empleando para ellos ingredientes ecológicos. Todo el proceso es tremendamente sencillo, de ahí el éxito que han cosechado en tan poco tiempo.
CookUnity está haciendo tanto estruendo con su llegada al mercado que incluso los chefs hacen cola para ser aceptados. Los responsables del colectivo han tenido que dedicar una sección en su página web para que los cocineros puedan enviar su candidatura. Por ello, no es descabellado pensar que el objetivo de 150 autores gastronómicos a mediados del año que viene que se ha autoimpuesto Marietti quede obliterado cuando llegue el próximo verano.
Mientras criban todos estos magníficos currículos, Marietti y su equipo continuarán haciendo lo que han hecho hasta ahora: crear una magnífica comunidad de cocineros de élite, emplear los mejores ingredientes en sus platos, dar libertad total para espolear la creatividad y ofrecer un servicio más que interesante a los consumidores.
Desconozco si llegará a funcionar pero como iniciativa es buena para democratizar la buena comis