Brian W. Fitzpatrick pasó por Google con todo tipo de honores. Fue cofundador de la oficina de ingeniería de Chicago (EE. UU.) y lideró diversos proyectos de programación desde allí. Más tarde, decidió formar Tock, empresa de la que es fundador y director ejecutivo de tecnología.
Tock es una app móvil que ayuda a gestionar las reservar de los comensales en los restaurantes. Cuenta también con una aplicación de escritorio para quien prefiera trabajar desde este.
El funcionamiento de la herramienta es simple pero efectivo. Además de ofrecer una interfaz sencilla para poder interactuar con la información, Tock implementa también trazabilidad. Las opciones de seguimiento complementan el software de forma que los restauradores puedan tener una idea más próxima a la realidad sobre cuál es el estado de las reservas en sus salones.
Para tener éxito en esta aventura, Brian se alió con el propietario de un aclamado restaurante. Nick Kokonas, dueño del Alinea de Chicago, ayudó a que las líneas de código iniciales se convirtiesen en un negocio viable.
Tras haber recaudado 9.5 millones de dólares en financiación de la Serie B y llevar en operación cinco años, dinero no es lo único que han amasado estos dos visionarios. A sendas cuentas corrientes bien nutridas se añade además una base de macrodatos sin parangón.
El análisis de la información recopilada por la app móvil permitió a Fitzpatrick dar a conocer algunas de las formas en las que los comensales pueden poner las probabilidades a su favor cuando están buscando mesa en un local muy solicitado. Los consejos no son más que la aplicación estadística de situaciones reales que están teniendo lugar de forma habitual en la actualidad.
A continuación te damos a conocer cinco maneras de mejorar tus posibilidades al reservar en un restaurante muy demandado.
1.- Reserva mesa para más gente, las mesas más difíciles son las de 2pax
Reservar mesa para dos personas es mucho más difícil que reservar para más.
Los salones de los restaurantes más deseados cuentan con mesas fijas para un número concreto de comensales. Las mesas para más de dos comensales sólo se dejan medio vacías cuando las reservas grupales no han sido suficientes para llenar el lugar.
Desde el punto de vista del cliente esto abre la puerta a reservar con amigos para garantizar que nadie se quede fuera.
No obstante, hay que tener cuidado con pasarse de listo. Si reservas para cuatro, pero solo dos se presentan, esto te meterá de lleno en la lista negra. Te saldrás con la tuya en una ocasión, pero tus subsiguientes reservas serán inspeccionadas con lupa. No merece la pena jugársela, es mejor hablar con amigos, ir en grupo y cumplir con lo prometido.
2.- Reserva en horas no muy demandadas, al principio o final del turno
En algunas apps móviles de reserva aparecen las horas disponibles presentadas en pantalla, pero en muchos gestores esto no es así. Es habitual que los clientes potenciales introduzcan en los casilleros una hora para comer o cenar muy demandada.
Las horas punta suelen agotarse rápidamente, y sin embargo en los horarios más extremos el comedor del restaurante acaba quedando medio vacío.
La persona que vaya a hacer la reserva puede usar este conocimiento para amoldarse a un horario más infrecuente y garantizar que encontrará una mesa disponible.
Este truco funciona incluso en los restaurantes más populares. Reservar cerca de la hora de apertura o cierre es muy buena idea.
3.- Conoce el funcionamiento interno del restaurante para saber la mejora época para reservar
No todos los restaurantes funcionan igual internamente. Tener esto en mente puede ayudarnos a reservar hora en ese establecimiento al que siempre hemos querido ir.
Cuando los restaurantes abren sus reservas a largo plazo, suelen hacerlo con una periodicidad concreta. Tal vez lo hagan todos los lunes a primera hora, quizás sea en ciertas fechas fijas cada mes o a lo mejor solo abren nuevas plazas cuando se ha cubierto un cupo de las precedentes.
Como si se tratase de una cola virtual, el futuro comensal puede acceder a su sistema de reserva favorito justo cuando se han abierto nuevas plazas y reservar mesa sin problema. De esta forma se puede, además, cumplir con todo tipo de exigencias en cuestión de horarios y ubicación dentro del local.
Por supuesto, para poder seguir esta estrategia es necesario saber cómo funciona internamente el restaurante, y para ello, nada mejor que preguntar directamente a la plantilla del local. Si se explica la situación no tendrán problema en darnos información sobre cómo posicionarnos mejor en esta suerte de colas virtuales para no fallar a la hora de conseguir nuestra ansiada mesa.
4.- No entres en listas negras y siempre asiste a tus reservas, no a los “no-shows”
En la industria de la restauración, una de los mayores feos que se pueden hacer es no aparecer por el restaurante una vez se ha reservado mesa, el famoso “no-show”. El negocio incurre en una doble pérdida cuando el consumidor actúa irrespetuosamente de esta manera.
Con índices de incidencia que alcanzan el 20% de las reservas, los no-show se tratan con una política de tolerancia cero. Una vez que has cometido el error de no asistir, te será difícil volver a reservar exitosamente en el restaurante en cuestión. Las posteriores reservas que hagas con tu perfil serán escudriñadas y puede que no sean aceptadas.
Algunos usuarios de los sistemas de reservas tienen la mala costumbre de reservar para la misma hora en diferentes restaurantes por si acaso hay cambio de planes a última hora. Esto es un error a la larga y algunas apps móviles y de sobremesa ya luchan activamente contra estas estratagemas impidiendo las reservas múltiples o penalizando a quien intenta a hacerlas, sin que sea necesaria la intervención del restaurante.
5.- Avisa con tiempo al restaurante si te es imposible ir
Hay una plétora de motivos que pueden hacer que cumplir con las responsabilidades adquiridas a través de la reserva sea imposible.
No hay problema siempre y cuando avises tan pronto como sea posible. Los restauradores son muy comprensivos con los clientes que actúan de forma respetuosa y llaman o escriben para indicar que la reserva ha de ser cancelada. Es más, si aún se desea pasar por el restaurante más adelante es muy posible que el personal que atiende las comunicaciones ofrezca fechas alternativas para mover la reserva.
En caso de no poder pactarse una modificación en ese instante, siempre cabe la posibilidad de que se den facilidades para que la reserva sea más sencilla cuando el comensal esté preparado para pasar por el salón.
Actuar de buena fe siempre merece la pena.
Con estos consejos reservar mesa en los restaurantes más conocidos de tu ciudad se convierte en algo factible.